Y cuando llego al centro,.. ¿Qué hago?

Recuerdo mi primer trabajo como promotora. Fue en un hipermercado promocionando unos pimientos congelados. Si, poco común. La verdad es que he promocionado cada cosa que alucinaríais.  Pero bueno, el caso es que cuando llegué no sabía muy bien como actuar, se me notaba a la legua que era una novatilla. Para que no os pase, o al menos no vayáis dando palos de ciego, seguir leyendo. ;)

Cuando lleguéis a un centro lo primero que debéis hacer es acudir a la persona que esté de seguridad en la puerta o en la recepción o punto de información (dependiendo del hipermercado). Debéis identificaros e informar que estáis allí para hacer una promoción. Ellos avisaran al encargado o al jefe de la sección del producto que vayáis a promocionar. En mi primer trabajo fue el encargado de la zona de alimentación, por ejemplo. Cuando el encargado confirme que todo esta correcto (que la agencia haya mandado tu documentación al centro) te darán permiso para entrar.

Normalmente la persona de seguridad que está en la puerta te preguntará tu nombre y para que empresa trabajas. Deberéis decir el nombre de la agencia. El o ella os “fichará” y muy probablemente apunte a la hora que entráis. Generalmente os dan una identificación como que vais a trabajar allí ese día (puede que ponga VISITA o algo similar).

Una vez con autorización para entrar debéis localizar al encargado de vuestra zona con la que anteriormente ha hablado el personal de seguridad. Puede que este os haya ido a buscar a la entrada o que os toque ir preguntando a todo el personal de la tienda donde está. Con calma, ya daréis con él. Yo suelo decírselo a la persona que está con la megafonía (si es que hay) o a cualquier reponedor (a veces llevan teléfono interno).

Si os digo que lo busquéis es porque os vendrá muy bien por varias razones. Lo primero de todo para que os vea con sus propios ojos que estáis allí y a vuestra hora, a veces les preguntan o tienen que informar sobre vosotras. Lo segundo y no menos importante, el os debe decir donde os debéis colocar. Puede que diga que donde queráis, pero puede que no le guste que te pongas en determinada zona porque molestas para pasar a los clientes o quiera que te pongas más visible en el pasillo central. Lo mejor de todo es que te hayan colocado el producto en el pasillo central o en una cabecera del lineal, para que esté bien visible y allá amplitud. Eso te facilitará mucho el trabajo. O puede que te coloquen tu producto justo detrás de una columna como me paso en una ocasión… ¬¬ La agencia te dice que te coloques donde esté el producto, pero en tienda a veces el producto está en dos zonas diferentes pues te han preparado una más visible para que te coloques tu.

Otra utilidad de localizar al encargado es para poder localizar vuestro material (en caso de que os lo envíen a tienda). Puede que el sepa donde está y os lo traiga, o puede que te diga que vayas tu al almacén y lo busques. Yo no soy partidaria de entrar al almacén ya que en realidad no debería de entrar allí. No es por vagancia ni mucho menos, es por si me llaman la atención. Además, el resto de personal de la tienda no sabe quien eres y que haces allí. Pero a veces no te queda más remedio que entrar e ir preguntado y excusándote con quien ves. Afortunadamente no se suelen extrañar ya que no eres la primera ni la última que ven merodeando por allí con su camiseta de alguna marca. Pero yo sigo encontrándome incomoda al tener la sensación de que no debería estar allí y que ese en realidad no es mi trabajo.

Cuando por fin encontréis todo y os coloquéis, ya solo queda poneros al trabajo con vuestra sonrisa y ¡a vender mucho! J

Y besito a todas y a ya sabéis que podéis escribirme. 

Mi valiosa agenda

Reconozco que soy bastante "apañá" y que me gusta enterarme bien de las cosas. Así que siempre voy con mi agendita a cuestas. Es una costumbre que adquirí en el instituto donde apuntaba los deberes, trabajos y exámenes en mi agendita. Trasladé esta costumbre a la universidad que fue cuando empecé a trabajar de azafata y promotora. Hoy en día la sigo utilizando. Lo único que ha variado es lo que apunto. Aparte de las típicas citas al médico, que de no apuntarlas se le olvidan hasta a alguien con memoria de elefante (por aquello de que te den cita para dentro de 14 meses, mínimo) apunto de todo: desde los cumpleaños hasta si he quedado con alguien algún día para hacer algo.

Pero en realidad este post va de la utilidad de la agenda para nosotras las azafatas. En este mundo de las promociones es fácil perderse. Cada fin de semana un horario, un lugar, un salario,... es fácil volverse un poco loco y no aclararse. Ahí entra la utilidad de la agenda. En ella apunto donde y a que hora trabajo cada fin de semana. También apunto el nombre de la agencia y el número de teléfono de contacto con esta en caso de tener que hablar con ellos durante el fin de semana. Este teléfono no tiene por que ser con el que nos han llamado ya que nos llaman en horario de oficina y lo más seguro es que sea otro número el que estará de guardia. Es un número que debéis tener para los posibles contratiempos que os surjan. Antes los grababa en el móvil... pero al cabo de los años tengo tal cantidad de números de teléfono de agencias y coordinadores en la agenda que no se de quien es quien. Así que, si tienes apuntado cada fin de semana el teléfono que es no habrá lugar a dudas.

Otro tema importante es la fecha en la que cobrarás, fecha que también apunto claro esta. Pasa al rededor de mes o mes y medio desde que trabajáis hasta que os pagan,... Así que es fácil que se os olvide cuanto es y que día os lo van a ingresar. Apuntar que día debéis tener echo el ingreso, cuanto dinero es, de que agencia y el número de teléfono de contacto. Suelo dar un margen de 4 días más o menos (según me urja el dinero) para pegar un toque a la agencia en caso de que no tenga el ingreso. Como tengo apuntado el teléfono no tengo que andar buscándolo,... imaginaros que no lo guardáis y que borráis los correos. A ver como os ponéis en contacto con ellos.

Otras de las utilidades de la agenda es apuntaros en ella las preguntas clave que os comenté que debíais hacer a la agencia para que no se os quedaran dudas. Yo aun las llevo apuntadas en un post-it pegado en la primera hoja de mi agenda. Y aunque no se me suele olvidar preguntar nada, suelo repasar la nota... a veces puede que incluso apunte algo más. Quien sabe, yo también sigo aprendiendo cosas.

Por último, si sois de llevar bolso grande, estaría muy bien que llevarais la agenda siempre encima. Nunca sabéis cuando os van a llamar, por lo que podréis consultar si ese fin de semana (o día entre semana ojo!) le tenéis libre y os vendrá de lujo para apuntar lo que os digan. Tal y como esta el mercado laboral, no hay que dejar escapar lo más mínimo!

Ahora os toca a vosotras, contarme: ¿utilizáis agenda? Si no es así, ¿como recordáis todo?Y si la utilizáis, ¿que apuntáis en vuestras agendas?

Saluditos!

Participación concurso Ache Azafatas: “¿Me das otro regalito? Es que tengo dos nietos…”

Buenas de nuevo a todos. Este post es el artículo que escribí hace aproximadamente un mes para mi participación en el concurso que hizo Ache Azafatas en el que pedían un articulo sobre nuestras experiencias en el sector. Yo aposte por seguir la linea que llevo en mi blog pero no hubo suerte. Os dejo aquí mis lineas y ya sabéis ¡¡comentar!! 

“¿Me das otro regalito? Es que tengo dos nietos…”

Esta frase y su variante “¿Cuántos regalitos me das si me llevo dos?” es de las que más me repiten cuando regalo algo en las promos. La gente le suele echar mucho morro y encima de que regalas algo, te piden que les des ración doble. Pues bien, vosotras ceñiros a lo que os diga la agencia. Si os piden más de lo que debéis dar explicar educadamente que no podéis, que la oferta no es esa. Aunque penséis que no pasada nada por dar algo más a un cliente, no sabéis con quien estáis tratando cuando trabajáis. Imaginaros que viene un representante de la marca y le decís que le dais dos regalos por un paquete de lo que estéis vendiendo cuando solo debéis dar uno. Pues ya la habéis liado. Al representante no le hará ninguna gracia y se lo dirá a la agencia. Y la agencia os llamará la atención. Y todo por una tontería de regalito.

Pensareis que es mucha casualidad. Pues no tanto. En varias ocasiones me ha “visitado” alguien de la marca. Y yo no tenía ni idea de que esa persona es de la marca hasta que se me ha presentado y me ha dicho quien es. Y ahora pienso,… vete tú a saber si no ha venido a verme en alguna ocasión algún comercial de la marca que no se me ha presentado. Puedes sospecharlo, pero nunca lo sabes a ciencia cierta. Yo os pongo en preaviso,… para que no os llevéis sorpresas ;)

Muchas veces os será difícil lidiar con la gente. Hay personas que se ponen muy pesadas y te chantajean diciéndote “O me das dos o no te compro nada”. Pues chicas, yo que queréis que os diga pero mi trabajo no es regatear con nadie, así que si os regatean es porque no están interesados de verdad en el producto y si en la chorradita que deis. Y muy posiblemente dejen el producto por ahí tirado llevándose el regalo. Así que si os chantajean, seguir firmes y decir educadamente y con vuestra amplia sonrisa que no podéis hacer otra cosa. Es lo que hay: si lo quieren así bien y sino pues a por otro potencial cliente. Con el tiempo aprenderéis a saber de que “pie cojea” cada cliente y no perderéis tanto en tiempo con determinados clientes. Muchos no entienden que tu estas siguiendo unas ordenes, que los regalos que te dan a ti son limitados y que no puedes hacer lo que te de la gana.

Tengo que confesaros que este tipo de personas son las que más me fastidian. Encima de que las regalas algo protestan ¡y les parece poco! Vale que a veces sean chorradas, pero en cualquier otra situación no se les regalaría nada. Que no os coman la moral diciendo “vaya guarrería”. No se a vosotras pero a mi siempre me enseñaron que “a caballo regalado no se le mira el diente”.

¿Devolver o no el material?

Después de una dura jornada de trabajo promocionando vete tu a saber que cosa toca recoger: stand, regalos, bolso, papeles,... Y os entrarán ganas de tirar el stand en el primer cubo de basura que veáis y deshaceros de algo de lo que lleváis encima. Error. La agencia os debe hacer saber que hacéis con todo lo que os ha mandado, si os lo debéis llevar o que hacer con ello. A mi normalmente me dicen que me lleve el stand (y todo lo demás) a casa porque van a venir a recogerlo. Supuestamente deberían llamar para decirte cuando van a venir a por ello. Pero os tengo que decir que nunca han venido a por el stand a casa. Esto no quiere decir que a vosotras os pase lo mismo, así que guardarlo. Yo lo hago por un tiempo. Normalmente doy de margen hasta que me pagan y después sinceramente lo tiro. Al contenedor azul ¿eh?. Si no han venido pasado un tiempo a por ello es que no les interesará mucho o se han olvidado de ello. Y mi casa no es un trastero.

Sin embargo, con el uniforme os digo que salvo en una ocasión siempre han venido a recogerlo. Incluso a veces siendo una camiseta ridícula, que quizá hasta les salga más caro venir a por ella que hacer otra. Por las circunstancias que sean el caso es que vienen a por ella. Así que guardarla y quedaros con el papel que os da la empresa de mensajería como que la habéis entregado. A mi no me ha pasado nunca, pero es posible que la empresa de mensajería pierda lo que tú le has entregado. ¿Cómo demuestras que tú se lo entregaste? Con ese papelito. Así que guardarle, que no cuesta nada y os puede sacar de un aprieto tonto por una camiseta. Normalmente la gente tiende ha echar la culpa a otro de sus errores.

De todas maneras, que nos os extrañe nada. A mi han venido a recogerme una camiseta feísima diciéndome que ni se me ocurriera lavarla porque estropeaba la serigrafía que llevaba (espero que la lavaran ellos porque sino puag! que asquete ¿no?) hasta tener aquí en casa desde hace dos años una impresora de fotografías y una cámara de fotos que dijeron que iban a venir a recoger y nunca más se supo. Vosotras avisar a la agencia de que lo tenéis (sobre todo si es algo caro como lo que me pasó a mi) y decir que no han venido a por ello. Pero tampoco hagáis el tonto llevándolo vosotras a la agencia o llamando miles de veces. Como ya os os dicho en otras ocasiones, que no os trasladen su problema. Yo intento ser “legal” y devolver lo que es suyo, pero tampoco hacer el imbécil llamando montones de veces, porque me dejo lo que me han pagado en llamadas con el móvil. Vosotras con avisar un par de veces ya habéis cumplido más que de sobra. Cada uno debe estar atento a su trabajo ¿no creéis?

Bueno ahora contarme vosotras: ¿Qué es lo más ridículo que os han venido a recoger a casa? Y por el contrario, ¿Cuál es la cosa de más valor que tenéis por casa porque no han venido a por ello? Contarme,… ¡seguro me sorprendéis!

Ya sabéis que me podéis mandar vuestras dudas y sugerencias a manual_azafata@hotmail.com y seguir en mi Twitter personal @irenecyta.

¡Muchos abrazos!